La Peña Mota Cetín sirve de limite entre los concejos de Parres, Ponga, y Piloña, cuenta con 1.134 metros de altitud, a pesar de su escasa altura es una montaña frecuentemente deseada por los montañeros.
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Una vez alcanzado el collado Fontecha se divisa en la lejanía la primera imagen de la Mota Cetín, se trata de una mole cárstica con una cima casi totalmente plana, desde esta distancia se divisan algunos arboles, y la experiencia personal hace suponer que se trata de una pequeña mancha de tejos, pero aún la distancia no permite asegurarlo.
Según la distancia a La Mota es menor, la sensación de existencia de tejos a lo largo de toda la peña se hace una evidencia, con gran satisfacción se une a la jornada montañera el complemento de una jornada de captación de tejos nuevos.
Al comenzar la trepada a La Mota los tejos aparecen con cierta profusión, son ejemplares aislados, pero algunos de ellos de considerable tamaño, hacen equilibrio en los riscos donde toman el agua necesaria para la supervivencia.
Algunos ejemplares de notable belleza, por su estructura, o por su caprichosa ubicación nos obligan a una parada para una mejor observación que luego disfrutaremos en la pantalla del ordenador.
Según ganamos altura la presencia de tejos es mayor, los ejemplares son también sensiblemente mas importantes y su estado de conservación es generalmente bueno, no se observa que exista ramoneo tan frecuente en otras zonas.
Una especial mención merece este gran tejo con su retorcido tronco abrazando la roca, la presencia del hombre y del perro nos da información sobre el tamaño del mismo.
Confieso mi especial predilección por los tejos que surgen de las rocas, he visto miles de tejos a lo largo de todo el Principado, y los que considero de mayor belleza son estos.
